Compendio de textos y resumenes sobre la historia y la economía del Ecuador. Toda reproducción está permitida mientras se cite la fuente.

Sunday, December 04, 2005

-Resumen de “Breve Historia Económica del Ecuador” Alberto Acosta.

-Resumen de “Breve Historia Económica del Ecuador” Alberto Acosta.
Los Rezagos de la Modalidad Colonial. La modalidad primario-exportadora.
El Ecuador ha pasado por diversas fases de acumulación: Una fase plagada de rezagos coloniales, una modalidad primario exportadora, un intento de la industrialización por sustitución de importaciones y en el S. XX una reprimarización modernizada. En este resumen corresponden la Hacienda y a la Agro-exportación (cacaotera). Estas fases han estado vinculadas siempre a alianzas de los grupos hegemónicos y dentro de estas se han gestado diferentes interrelaciones regionales y diferentes formas de articulación con el mercado mundial. (1) En el S. XVIII con las reformas borbónicas, comienza a configurarse el poder de los latifundistas bajo el sistema hacendario, mediante la expropiación y apropiación de tierras por parte de los criollos a costas de los indígenas, y la captación de la mano de obra indígena recién liberada de los obrajes arruinados; por medio de la institución del concertaje y la prisión por deudas. Este poder económico, pronto se expandió al ámbito político y no se diga social. Así, liberados del poder de la metrópoli española comienza el proceso independentista, donde los indígenas tuvieron un papel pasivo, debido que era una revolución meramente criolla. Así, los herederos de los colonizadores a través de la República acentuaron su poder y su explotación de la población nativa, al no interponerse la Corona en sus intereses. (2) El Ecuador entonces surge como República independiente en 1830, a partir de lo que fue la Real Audiencia de Quito, cargando sobre sí los pesados rezagos coloniales; la ruina del sector obrajero y minero, conflictos territoriales y los costos de las guerras de independencia, en especial de la liberación de Perú y Bolivia. Nace también junto con la Independencia la identidad regional de los tres poderes básicos que marcarán hasta el día de hoy la historia nacional. Quito y la región sierra centro-norte que basará su economía en el sistema hacendario y aglutinaría la población; Cuenca y la región centro-sur donde primará la pequeña propiedad agrícola, la artesanía y estará rezagada respecto a las otras regiones y Guayaquil, con el gran latifundio siendo el centro de la actividad agro-exportadora del Litoral ecuatoriano. A pesar de esto, se forma un Estado que se basa en la alianza entre los terratenientes serranos y los exportadores costeños, que subordinan y utilizan el poder de la iglesia y el ejército; todo esto junto a una lenta configuración hacia el modelo primario-exportador de “crecimiento hacia fuera” sustentada en la estructura colonial. En estas condiciones no se formó un Estado Nación, por la exclusión de las masas y la falta de historia común entre los indígenas, mestizos y el grupo gobernante ligado al mercantilismo colonial.
La mayoría de la población sobre todo indios, estaban atados a la hacienda por el concertaje, otros dependían de la pequeña propiedad agrícola y de relaciones precarias o precapitalistas como los huasipungueros, yanaperos, arrendatarios, aparceros, partidarios y huasicamas; también existió núcleos de esclavos hasta su manumisión en 1851 por el General José María Urbina. Mediante el concertaje y el poder político de los terratenientes serranos se mantuvo atada a la mano de obra en esta región; así surgen tensiones entre la Costa y la Sierra: por la mano de obra barata y por la adopción de políticas proteccionistas (favorecen a la Sierra y su pequeña manufactura) o políticas de apertura que favorecían a los exportadores e importadores costeños. También se ve un conflicto en la estructura tributaria, el diezmo fue el tributo base en la época de la predominancia serrana, pues se cobraba sobre la producción cosa que afectaba a los grandes productores costeños; pero fue abolido años más tarde por la presión de los productores de cacao del litoral, y reemplazado por un impuesto sobre la propiedad que afectaba más a los latifundistas serranos. Otro importante fenómeno fue que mientras el sector agro-exportador iba creciendo en la Costa ecuatoriana, se produjo un trasvase de población de la sierra a la costa y la especialización interna de la economía; donde la sierra era proveedora de alimentos baratos (algunas manufacturas-paños-) y mano de obra para la región del litoral; que era el sector vinculado al mercado mundial, mediante la exportación primaria (cacao). Nace así, una clase “rentista y parasitaria”, en la costa, que exportaba materias primas a los países centrales e importaba manufacturas de los mismos. Esta clase no podía ser la base para una burguesía nacional, que consolide un capitalismo más autónomo. El problema radicaba en que la producción del principal producto, el cacao, era extensivo, pero no requería de una gran inversión en capital, ni de invención tecnológica; y funcionaba con una mano de obra barata que se explotaba con relaciones precapitalistas en su mayor parte. Es decir, que no podían generar externalidades positivas de la innovación y peor aún un mercado interno basado en el salario de los campesinos que era más bien decreciente. Hay que tomar en cuenta que su alta rentabilidad, no incentivó a los propietarios de los excedentes en ingresar en actividades productivas alternativas. Finalmente, al basarse gran parte de la economía nacional en la producción y exportación de un solo bien (cacao), nos ligo profundamente a los vaivenes de la economía mundial (europea y posteriormente la norteamericana), he hizo que nuestra economía fuera tremendamente sensible a los shocks externos. El Estado político fue el sostén para la débil integración de las fragmentadas economías regionales. El escaso financiamiento del Estado provino del tributo indígena, de los estancos, de los diezmos y del endeudamiento interno; que se gastaba en mantener una onerosa burocracia (para la época), un costoso ejército y al clero. La deuda interna se convierte tempranamente en una herramienta para el enriquecimiento y aumento del poder de los comerciantes guayaquileños. Este proceso conspiró con el fortalecimiento fiscal, pues a mayor endeudamiento, mayor enriquecimiento privado; dando así poder a grupos privados sobre el interés general; siendo esta relación determinante en la vida política nacional. (3) La debilidad de la integración nacional llega a su punto más bajo en el año 1859, donde se forma 4 gobiernos locales, en Quito, Loja, Cuenca y Guayaquil, que sumados a una invasión peruana pone en riesgo la existencia del país mismo. De esta crisis surge la figura de García Moreno (1860-875), quien toma el poder y consolida el Estado Terrateniente-Oligárquico; bajo una fuerte represión, una ideología centralista y teocrática pero también, mediante una aglutinación histórica de las clases dominantes de sierra y costa y una vinculación de los mismos mediante la inserción definitiva de la economía al mercado mundial. Esto no terminó, sin embargo con las contradicciones de la oligarquía latifundista serrana apoyada por la Iglesia Católica que luchaba por mantener el poder y las aspiraciones hegemónicas de los grandes exportadores, banqueros y comerciantes. Y aunque se modernizó institucionalmente el Estado no se eliminaron las formas precapitalistas de explotación. Se creó el Banco del Ecuador en 1868, que llegaría a ser el eje de la modernización financiera y mercantil en el S. XIX (además de la Casa Luzuraga) y con estos el endeudamiento del Estado con la Banca Privada, proceso que culminaría en 1925 (Rev. Juliana). Surge también el Capital Financiero Comercial que comprendía los banqueros individuales, los banqueros exportadores y los comerciantes importadores. (3) Este proceso de integración fue apoyado también con la Revolución Liberal, que a pesar de ser contrario ideológicamente al modelo garciano (anti-clero); supo consolidar el creciente poder de hacendados, agro-exportadores y banqueros. El modelo de “crecimiento hacia fuera” o basado en la demanda externa, fue la base del auge económico (llamado cacaotero) del Siglo XIX, que permitió crecer a la economía ecuatoriana en algunos años más que ninguna otra en Suramérica. Este modelo se sustentó en el aumento del ingreso real de los países industrializados, que permitió al Ecuador integrarse en la especialización internacional del trabajo como proveedor de productos tropicales. Hay que destacar que las rentas estuvieron en manos nacionales a pesar del creciente imperialismo de los países centrales y el crecimiento de los monopolios; pero estas rentas no fueron reinvertidas sino que fugaron al exterior o fueron gastadas suntuariamente. Finalmente, a pesar de esta riqueza natural, la renta diferencial tan grande que existía entre los grupos oligárquicos y las masas trabajadoras; lograron detener el desarrollo del capitalismo industrial y de un mercado autónomo en el país; la economía nunca logró relacionarse o encadenarse para lograr reinvertir en procesos de mayor valor agregado las rentas cacaoteras. (4) La revolución liberal es entonces, en cierta medida, el cambio del polo de poder de la sierra conservadora latifundista a la costa exportadora-importadora; junto a las reformas sociales (el laicismo) y la “ley de manos muertas”, fue crucial la terminación del Ferrocarril Quito-Guayaquil, que se hizo con ayuda del norteamericano Harman, junto con una renegociación de la “deuda inglesa” y la emisión de nuevos bonos y la obtención de nuevos créditos; esto bajo la constancia de Alfaro logró que el 25 de junio de 1908 el tren llegara a Quito desde Guayaquil, dinamizando el transporte interno y cambiando las relaciones económicas del país. A pesar del mal manejo administrativo y del financiamiento que sucedió a este logro es innegable el efecto dinamizador de esta obra; que fue la base de una integración aún más profunda del país al modelo de crecimiento hacia afuera, quitando inclusive las barreras físicas proteccionistas de la sierra. También, los regímenes liberales dieron un mayor apoyo a las elites costeñas, entre ellos a los banqueros que mediante la deuda interna y la emisión de moneda (muchas veces sin respaldo) logran cada vez mayor poder. Esto en el contexto de una larga historia de problemas de oferta monetaria, básicamente por la inexistencia de una agencia emisora estatal (luego del cierre de la Casa de la Moneda), de una moneda fuerte (el peso feble era una moneda débil) y de las falsificaciones o la circulación de moneda extranjera. Funcionan como principales casas emisoras el Banco del Ecuador, la Casa Luzuraga en una primera etapa y más tarde nace el “sucre” el 1 enero de 1895 emitido por el Banco Particular de Guayaquil, en un país caotizado por los problemas antes mencionados, es bienvenido y ayuda a modernizar y a facilitar las relaciones comerciales y económicas en el país. En 1890 se decreta que es la única moneda oficial. Funciona con patrón bi-metálico, hasta la crisis de la plata en 1890-97, y luego por iniciativa de Alfaro se establece el patrón oro en 1898. Este último se configura en un verdadero poder político, y su presidente Francisco Urbina Jado es llamado el “gran elector”, por su capacidad influir en las elecciones presidenciales (por imposición y fraude). Así luego de la muerte de Alfaro, surge con fuerza en el gobierno de Leonidas Plaza un endeudamiento mayor con la Banca Privada, que anteriormente creció grandemente con pretexto de la revolución “Conchista” que dura 4 años en Esmeraldas y Manabí y que en el contexto de la 1era Guerra Mundial en 1914 , llevan a que se dicte la Ley de Moratoria, destinada supuestamente a salvar las reservas de oro del país, pero que salvaron a los Bancos (entre estos al Comercial y Agrícola) que habían emitido moneda más allá del respaldo que poseían. Esta ley se prolongó, en lo que se llamó el período Plutocrático, donde el verdadero poder radicó en los banqueros (con el ya mencionado Urvina Jado y Plaza como pilares). Culminando este período con la Revolución Juliana en 1925, que sería el comienzo de la estatización de la emisión monetaria y la institucionalización de la “cuestión social” (fundación Banco Central 1927). (5) La 1era Guerra Mundial en 1914 y el consecuente cierre y pérdida de los mercados Europeos, significó el inicio de la crisis del cacao. Significó también el fortalecimiento de la presencia norteamericana y el desplazamiento de los capitales británicos por sus capitales en América Latina. En 1920-1921 se agravó la crisis. Aún finalizada la guerra, aparecieron nuevos países exportadores y bajó el precio por una sobre-oferta; cuando los precios se recuperaron las plagas de la “monilla” y la “escoba de bruja” dieron el toque final. En estos años se recurrió a la devaluación para mantener la competitividad ecuatoriana. En resumen el fin del auge cacaotero estuvo dado por situaciones producidas en el mercado mundial. Los efectos de la crisis del cacao fueron el desempleo y la reaparición de formas precarias de producción y el aumento de la miseria en las masas.
Deuda Externa: Para lograr la independencia, los pueblos latinoamericanos tuvieron que recurrir al financiamiento inglés, que a pesar de tener como base un compromiso de honor, fue negociado en términos impropios e injustos. Luego de la separación de la Gran Colombia, en el año 1834 el Ecuador no envía representante para la división de la “deuda inglesa”, donde se asume el 21.5% de la misma. Esta fue ratificada en 1837 por Vicente Rocafuerte, desde entonces los malos términos de la negociación y la falta de financiamiento para la misma, ha sido un escollo en la vida nacional. En 1854 se firma el convenio Espinel-Mocatta que termina con 20 años de moratoria y se basaba en la entrega de algunos recursos del estado y de terrenos baldíos. Pero el Perú protesta, pues dice que los terrenos cedidos por el Ecuador son suyos. Con García Moreno las condiciones básicas se mantuvieron, pero en 1862 se tuvo que suspender el pago de dividendos. En 1865 se propone la enajenación de las Islas Galápagos, en beneficio de los tenedores de la deuda, hasta que en 1869 se vuelve a la moratoria. Antes de finalizar el siglo XIX surge el interés por conseguir una solución al problema de la deuda y conseguir una adecuada inserción del país en el mercado mundial y de obtener créditos para financiar el ferrocarril. Antonio Flores Jijón, en 1888 llama al Congreso para tratar el tema de la deuda, estando en moratoria, pero anuncia su intención de adquirir bonos y estos suben de precio. En 1894 el Congreso suspende de nuevo el pago de la deuda; Eloy Alfaro llama a la deuda la “deuda gordiana” y en 1896 “decretó suspender el pago de la deuda externa hasta que se obtenga un arreglo equitativo y honroso con los tenedores de bonos”. Esta nueva suspensión de pagos no fue por incapacidad de cumplir los compromisos sino producto de una posición pragmática y clara de mejorar los términos de su renegociación.

Resumen: El Poder Político en el Ecuador (Oswaldo Hurtado).

Resumen: El Poder Político en el Ecuador (Oswaldo Hurtado).

La Hacienda.-(1820-1949) La Hacienda es la institución básica de la formación de la República. Siendo entendido por esta, según palabras de Hurtado como: “…toda unidad de producción agrícola que usa mano de obra dependiente y que explota la tierra y el trabajo de manera tradicional.”[1], que se conforma paulatinamente en la Colonia desde el Siglo XVIII y en el siglo XIX adquiere sus características definitorias. La Hacienda se forma por la compra, el despojo, la herencia, matrimonio, donaciones y mayorazgos. En la Sierra la hacienda se afianza por la falta de títulos de propiedad de los indígenas, cuyas tierras cayeron en manos de criollos, que se apropian también de las tierras del Rey. En la costa, con el auge del cacao, se amplían con las tierras colonizadas y la tierra de los pequeños labradores. Se produce una concentración de la tierra en pocas manos, siendo la mayoría de hacendados, herederos de los encomenderos y la iglesia (jesuitas).

Junto a la construcción de la República y a la decadencia minera, desaparecen los obrajes y la industria textil serrana. Así, la única fuente de riqueza es la tierra. La Hacienda entonces surge como la institución económica más importante. Luego de la crisis económica causada por la Independencia, se produce una recuperación de la Sierra, de la mano de un aumento de la demanda interna de alimentos y la exportación de cascarilla, paja toquilla, cereales y cueros; en la Costa, el cacao principalmente; pero también arroz, café y la caña de azúcar. La importancia económica de la hacienda es trascendental, puesto que es la más importante fuente de empleo, con el alrededor de 70-80% de la población viviendo de la agricultura. Así mismo, en las haciendas de la Costa existen almacenes que proveen todos los bienes a los trabajadores, que reciben como pago, “bonos de adquisición”. Como los hacendados viven en las ciudades, también la Hacienda se vuelve fuente de ingreso para el Sector Artesanal y Profesional. Las Exportaciones del Ecuador son básicamente agrícolas. El Estado obtienen la mayor parte de sus ingresos, de los impuestos aduaneros, y en menor manera de los impuestos a los indios, estanco de aguardiente y diezmos; todos estos íntimamente relacionados con la agricultura, el motor de la economía de la República.

La ocupación de mano de obra de la hacienda en la Sierra, se basa en el concertaje, (Cédula Real 1601) según el cual “…se autoriza que los indios concierten libremente su trabajo por semanas o por días. Con el tiempo por este contrato –ordinariamente vitalicio- un campesino que carece de tierra se compromete a trabajar para un hacendado todo el año o la mayor parte de él. Estas obligaciones se extienden a su familia que debe colaborar en ciertas faenas agrícolas y prestar periódicos servicios domésticos: sus hijas como servicias y él como huasicama.”[2] A cambio el patrón le entrega dinero, granos o animales (suplido), un huasipungo o pedazo de tierra para el sustento de su familia. Sin embargo, este sistema obliga a los indígenas a caer en deuda por el sistema de los suplidos. Cada día de trabajo es acreditado a su deuda y esta puede ser heredada por su familia. Toda esta institución opresiva estaba sustentada con “la prisión por deudas”, que permitía encarcelar a los campesinos que según el patrono no cumplía con sus obligaciones. Otras formas de explotación de la mano de obra, fueron la sembraduría o finquería, por el cual un labrador consigue un espacio en una hacienda mediante endeudamiento o crédito y planta cacao, café, arroz o algodón. Cuando se realiza la cosecha es obligado a vender a venderle al patrono a un precio inferior del mercado, y con este dinero paga las deudas contraídas. Están, de la misma manera, la aparcería o mediería, contrato por el cual un campesino aporta trabajo y semillas y el patrón la tierra, y se divide la cosecha por partes iguales. El trabajo esclavo no es importante en la República. El trabajo asalariado existió en algunas haciendas de la Costa, pero son sólo una forma embrionaria de capitalismo.

La explotación al indio, al campesino, al montubio; se basa en la propiedad de la tierra y la dependencia total del peón a la hacienda; toda la sociedad se basa en la explotación de estas clases; y esta explotación y abuso ejercido por el hacendado es el gamonalismo.

La Hacienda fue además de eje económico, el eje del poder político; siendo los hacendados quienes ejercieron el poder directa o indirectamente. En la naciente República, los hacendados fueron los Presidentes, los Ministros, los diputados; es decir la élite dominante. La estructura de la autoridad ejercida por este grupo, fue primero de carácter familiar; entendido esto como un jefe de familia como principal y sus parientes como autoridades secundarias. Luego, el hacendado, es más que una autoridad laboral, sino que actúa de Juez, de Policía y de Legislador. Regula además del trabajo, la vida privada de sus peones. Es la cabeza de una sociedad paternalista, opresora, protectora y autocrática; donde su autoridad no es cuestionada por los campesinos que ven al hacendado como un ser superior; y este lo considera natural por los beneficios que este entrega a los peones. El hacendado tiene todo el poder, es una especie de cacique, que por la propiedad de la tierra, influencia en la vida económica y social tiene el poder político; que es una especie de señor feudal con restricciones; que basa su poder para llegar a gobernar, en una “clientela política” que no es más que su campo de influencia, el que utiliza para acumular más poder. Para el pueblo campesino, el interés de la patria no es más que el interés de su patrono. Aquí están las bases del caudillismo político y la raíz de lo que sería el populismo.
[1] EL PODER POLÍTICO EN EL ECUADOR, Hurtado Oswaldo, Quinta Edición, Editorial Planeta Ariel, Quito Ecuador, 1981.
[2] IDEM

La Gran Depresión: (1930)

La Gran Depresión: (1930) Ha sido la debacle económica más catastrófica de la era moderna en los países desarrollados. Entre 1929 y 1932, la producción industrial se desplomó en todo el mundo, cayendo casi a la mitad en los Estados Unidos, en alrededor de un 40% en Alemania, en cerca del 30% en Francia y en un 10% en el Reino Unido, donde la caída había comenzado en los años veinte. Siendo estas las mayores economías industrializadas del Globo. Los países industrializados también experimentaron una deflación sin precedentes, con bajas de precios de cerca del 25% en el Reino Unido, algo más del 30% en Alemania y los Estados Unidos, y más del 40% en Francia. Sin embargo, el mayor costo humano fue el desempleo, que llegó a niveles inusitados y trágicos. En Estados Unidos, en 1933, una cuarta parte de toda la fuerza laboral del país estaba sin empleo. Alemania también sufrió un aumento catastrófico del desempleo durante los treinta. Fue un fenómeno mundial, que se diseminó desde los países desarrollados hacia los países en desarrollo. A través de América La tina, África y Asia, las economías se derrumbaban debido a que los precios de las materias primas cayeron en los mercados mundiales tras la violenta caída de la demanda de los países industrializados. La inestabilidad política siguió al colapso económico. Surgieron dictaduras en varios países de Europa, Japón y el mundo en desarrollo, cuando las democracias fueron incapaces de manejar el caos de la economía. El ascenso de Hitler al poder puede vincularse directamente a la profunda crisis económica de Alemania. Los principales países industrializados respondieron a la crisis imponiendo barreras al comercio con otros países, con el objeto de aumentar la demanda interna y potenciar el empleo; sin embargo, la política estuvo mal guiada y aumentó el desempleo en el exterior. El comercio internacional se desmoronó, rompiendo los lazos económicos entre los países y al final se exacerbó el desempleo en todos lados y se preparó el terreno para la Segunda Guerra Mundial. Keynes con su obra de 1936 “Teoría General sobre el Empleo, el Interés y el Dinero”; fue le primero en analizar con lucidez las causas de la Gran Depresión. Para él, estuvo causada por una abrupta baja de las inversiones debido a las expectativas pesimistas de los inversores de obtener una menor ganancia en el futuro; y propuso como medida compensatoria el papel activista del Gasto del Gobierno y política monetaria, para potenciar la economía; naciendo así una economía del “lado de la demanda” y la Macroeconomía moderna. Mucho más tarde, Milton Friedman, el premio Nobel, y su coautora Anna Schwartz, centraron su explicación de la Gran Depresión en la política monetaria contractiva aplicada por los Estados Unidos durante el período que va de 1929 a 1933. Se subraya que la política monetaria fue totalmente incapaz de contrarrestar la ola de quiebras bancarias que ocurrieron en los Estados Unidos en los primeros años de 1930 y, por tanto, no pudo evitar que una baja normal del ciclo económico se transformara en la calamitosa depresión que ya es historia. Charles Kindleberger, un aclamado historiador económico, ha argumentado a favor, de una interpretación más internacional. En su opinión, faltó un liderazgo mundial para evitar que la recesión se transforme en depresión. Ni EEUU ni Gran Bretaña, propusieron una política para detener la espiral negativa, deteniendo la escalada arancelaria, u otorgando créditos para la recuperación económica. La ley proteccionista Smoot-Hawley en 1930 fue de hecho uno de los peores causantes de la depresión. Otra explicación propuesta por Meter Temin, quien afirma que la Gran Depresión fue el resultado retardado de la Primera Guerra Mundial y los conflictos que le siguieron. Asegura también que el acuerdo monetario internacional de ese entonces, el patrón oro, fue le principal responsable de que el colapso económico se propagara internacionalmente, pues impedía adoptar políticas monetarias independientes, en especial políticas expansivas que podrían haber ayudado a revertir la Depresión. La salida fue lenta, pero en EEUU surgió el New Deal siendo causa importante.

Revolución Juliana II (Instituciones)

REVOLUCIÓN JULIANA Desde 1968 existieron los Bancos de Emisión, que tomaron poco a poco un papel protagónico en el desarrollo histórico del país, y sobre todo asumieron gran parte del papel del Estado en la economía, como proveedores de créditos para toda actividad productiva significativa, el control del tipo de cambio, de la tasa de interés y de la oferta monetaria; así como tener poder sobre el gobierno mismo mediante los préstamos al mismo. Estaban sujetos al patrón oro de 1898 donde debían respaldar sus emisiones en al menos 50% y ser convertibles. Luego de muerto Alfaro y sus principales lugartenientes, desaparece el liberalismo radical y llega al poder el liberalismo moderado. En el gobierno de Leonidas Plaza se dicta la “Ley Moratoria”, que declara la inconvertibilidad de los billetes circulantes en oro; se prohíbe la emisión de más billetes y se crea una Comisaría de Bancos; sobre estas limitaciones en la dominación plutocrática 1912-1925 los Bancos hacen sobre-emisiones y logran grandes ganancias. Entre los opositores están N. Clemente Ponce que dice que el oro saldrá del país y que esta ley afecta a los artesanos y clase asalariada; Luís Napoleón Dillon es el más fuerte crítico y apunta directamente al Banco Comercial y Agrícola de Guayaquil de haber hecho emisiones sin respaldo y con complicidad del Gobierno atracaban al país. Víctor Emilio Estrada es el defensor de esta ley, de la que dice era la única forma de salvaguardar al reserva de oro del país, frente a la 1era Guerra Mundial (Además de la campaña contra la “Revolución Conchista”. Frente a esta degradación de los liberales, convertidos en plutocráticos, surge como única respuesta nacional, un alzamiento de una liga de jóvenes militares al mando de Idelfonso Mendoza; se apresa a los pilares del régimen plutocrático, Leonidas Plaza y Francisco Urbina Jado. El espíritu de esta revolución es cívico, nacional y más que todo moralizador. Existe primero una junta militar, a la que sigue 6 meses después una junta cívica militar y posteriormente una Junta civil, un gobierno colegiado civil, y finalmente la dictadura civil de Isidro Ayora. Esta revolución fue la primera de carácter institucional (militar no caudillista) y al mismo tiempo significó la imposición de los intereses nacionales (en materia monetario-financiera) sobre los privados corporativistas y la institucionalización de la cuestión social, como política de Estado y no de gobierno. En la segunda Junta de Gobierno de la que fue parte Dillon, dictó una ley proteccionista para las nacientes industrias, forzó la aceptación de todos los billetes circulantes, creó el uso de patentes para los documentos negociables, fiscalizó y multó a los bancos que habían realizado sobre-emisiones y principalmente propuso y mediante ley creó el Banco Central del Ecuador, que era más bien una “Caja de Emisión Central de Emisión y Conversión”; sin embargo, en Guayaquil se da un movimiento “antijuliano” que incluso revive los fantasmas del federalismo y la autonomía, esto y la influencia de la bancocracia impidieron que se la ley entre en vigencia; y tuvo que esperarse que llegue la Misión Kemmerer, que fue contratada por los julianos y recibida bien por todos; esta después de cinco meses de su llegada en 1826 después de un trabajo profesional, en cinco meses propusieron las siguientes reformas constitucionales, legales y administrativas: Ley de Banco Central, Ley de Moneda, Ley General de Bancos, Ley de Presupuestos, Ley de aduanas y otros impuestos, Ley de creación de la Contraloría, Ley sobre Impuesto sobre la renta. El 10 de agosto de 1927 comienza a funcionar el Banco Central, institución insignia de la creación de un “Estado Nacional” sobre el Estado Corporativista del Siglo XIX histórico. También se crea la Superintendencia de Bancos y el Departamento de Bancos el mismo año, que serían los encargados de hacer cumplir la ley de Bancos dictada por en 1926 por Isidro Ayora. Todas estas instituciones y reformas insertaron al Ecuador en el Siglo XX histórico, modernizándolo e inagurando el intervencionismo Estatal para el progreso, que terminaba con la política liberal desde 1895 que había degenerado en la plutocracia.

REVOLUCIÓN JULIANA (1925-1947) I

REVOLUCIÓN JULIANA (1925-1947) En el período 1925 ­ 1960 se destacan dos momentos bastantes definidos: el uno que va de 1925 a 1948 y el otro de 1948 a 1960. El primer momento es de gran inestabilidad política y de conflictos internos. Como insurrección a la inconformidad económica principalmente, planteada por los gobiernos plutocráticos, el 9 de julio de 1925 la liga de jóvenes militares estaban a cargo de Ildefonso Mendoza Vera, los cuales apresaron al gral. Leonidas Plaza y Francisco Urbina y a los Jado-gobernantes y posteriormente, formaron la Junta de Gobierno Civil en la cual participó Luis Napoleón Dillon, quien era uno de mentalizador de tal insurrección. En marzo de 1926 se nombró a Isidro Ayora Presidente Provisional,"como consecuencia de esta asesoría –a la que se ha criticado de no haber entendido la realidad nacional y de haber propiciado una excesiva burocratización y papeleo- se crearon instituciones que aún tienen trascendental importancia en el desenvolvimiento de la vida nacional: el Banco Central, la Superintendencia de Bancos, la Contraloría General de la Nación, la caja de posesiones. Con la llegada del año 1930, en nuestro país se sintieron en toda su fuerza los efectos de la crisis económica mundial. El descontento aumentó día a día; a mediados de 1931 el pueblo acudió a los cuarteles en busca de armas. Ayora designó al Coronel Luis Larrea de Alba, (…), como su ministro de Guerra, (…). El pueblo se lanzó en contra del batallón que respaldaba a Larrea (…). Larrea entregó el poder al Presidente del senado, el ex presidente de la república, Alfredo Baquerizo Moreno. Como encargado del Poder, Baquerizo Moreno convocó a elecciones para octubre de 1931."(cit. Diezcanseco Pareja, Alfredo, breve historia del Ecuador, tomo2 pp. 87, 89, 90) En la que ganó el liberal moderado Neptalí Bonifaz, triunfo que no fue aceptado y causó la guerra de los cuatro días. Sin Cacao: A Producir Café, Arroz y Azúcar A pesar de la caída del cacao, el país en este nuevo período tuvo una economía que, en su conjunto, siguió ligada a los ciclos de producción agrícola para el mercado internacional. La crisis del cacao obligó a los terratenientes costeños a diversificar sus cultivos y a reorientar la producción hacia el café, arroz y azúcar, aunque este último, en mucho, estuvo destinado al consumo nacional. La industria no se estancó, al contrario tuvo un desarrollo incipiente, siendo la producción textil a que adquirió un papel importante en este período. En efecto, medio de la crisis mundial de los treinta, esta actividad fabril, en participar la de la sierra centro norte, creció en forma significativa. De igual manera, la exportación de sombreros de paja toquilla, cuyo centro de producción estaba en la sierra sur, tuvo un rol importante en el ingreso de divisas. El sector hegemónico de la economía, el agroexportador, dependiente de los vaivenes del mercado mundial, en especial el de los Estados Unidos, nuestro principal abastecedor y comprador desde inicios del siglo, con la depresión de los países centrales a comienzos de los treinta, experimentó la reducción de la demanda para sus productos; sin embargo, en los albores de los cuarenta, la Segunda Guerra Mundial estimuló nuevamente la producción y exportación de materia prima, como caucho y balsa, utilizadas para sustentar el esfuerzo bélico, pero también de café, arroz e incluso cacao. La crisis económica y la diversificación de los cultivos de la costa propiciaron dinámicas en el campo que forzaron a buena cantidad de campesinos a trasladarse a las ciudades de la región. En ellas, algunos tendrían acceso a las pocas fábricas; los más, encontrarían cabida en los más bajos empleos, constituyendo esa gran masa marginal que crecerá violentamente en décadas venideras. La Misión Kemmerer En resumen, la mayoría de los ecuatorianos esperaba con interés la llegada de Kemmerer". Demostraban, sin embargo, motivos encontrados al acoger a su Misión. Los defensores de la Revolución Juliana ­ especialmente Dillon y el ejército ­ contaban con Kemmerer para remediar los males económicos de la nación, particularmente las deficiencias en el sistema monetario y bancario.

Contexto liberal latinoamericano y Revolución Liberal y Modernización Económica.

Contexto liberal latinoamericano y Revolución Liberal y Modernización Económica.La clase criolla que había heredado el poder tras la independencia abolió muchas de las instituciones, impuestos y derechos de aduana en concordancia con el liberalismo del siglo XIX; pero sus grandes esperanzas se desvanecieron con la crisis política y la decadencia económica que caracterizaron los primeros años de la mayoría de las nuevas naciones. A mediados del siglo XIX, los caudillos tomaron las riendas del poder político, económico y social en casi toda la región. A finales del siglo XIX había triunfado en lo político el liberalismo, y en la economía se abrían nuevas posibilidades para la agricultura comercial, la minería y la modernización en las infraestructuras. Estados Unidos había reemplazado a Gran Bretaña como mercado más importante y como principal inversor de bienes de capital en Latinoamérica, y en el siglo XX estableció su hegemonía a todos los niveles sobre la región, interviniendo con frecuencia en los asuntos internos de la mayoría de los países del continente. Puerto Rico: En 1897 se concedió la autonomía política y administrativa a la isla y un año después se constituyó el primer gobierno de Puerto Rico presidido por Francisco Mariano Quiñones. En 1898, a raíz de la Guerra Hispano-estadounidense, España cedió Puerto Rico a Estados Unidos por el Tratado de París (10 de diciembre de 1898). En 1900 el Congreso de Estados Unidos elaboró la Ley Foraker, por la cual el poder político de la isla quedaba en manos de funcionarios civiles. En 1917, con la aprobación de la Ley Jones, el Congreso de Estados Unidos otorgó la ciudadanía estadounidense a los puertorriqueños y estableció medidas que tenían como objetivo resolver los problemas sociales y económicos. Cuba: Durante la década de 1830 el gobierno español se volvió cada vez más represivo, lo que provocó un movimiento muy extendido entre los cubanos para obtener la independencia. En 1834 y 1838, durante el gobierno despótico del capitán general Miguel Tacón, las rebeliones y conspiraciones contra el dominio español caracterizaron esta época. En 1844 un levantamiento de esclavos negros fue brutalmente reprimido. Entre 1848 y 1851 surgió un movimiento favorable a la anexión de la isla a Estados Unidos, que terminó con la captura y ejecución de su máximo dirigente, el general Narciso López. España rechazó varias veces las ofertas del gobierno estadounidense para comprar la isla. En 1868 tuvo lugar el grito de Yara, primer levantamiento revolucionario dirigido por Carlos Manuel de Céspedes, quien proclamó la independencia cubana. La consiguiente guerra de los Diez Años, muy costosa tanto para España como para Cuba, finalizó en 1878 con la firma de la paz de Zanjón, acuerdo que otorgó importantes concesiones a los cubanos. Las Montoneras, Alfaro y la Revolución.- Las montoneras fueron probablemente el más importante fenómeno de movilización social del siglo XIX republicano. Toda la tropa montonera o al menos gran parte de ella andaba a caballo. Así surge el joven revolucionario Eloy Alfaro que en 1882 lanza su campaña desde Manabí a Esmeraldas en contra del dictador Veintimilla, fracasa pero al final de este año sus seguidores logran derrocar al gobierno. En las elecciones, sin embargo, una coalición de los partidos conservadores con algunos liberales lograrían dar un respiro a la oligarquía, que duraría 11 años en el período Progresista. Se suceden los gobiernos de José María Plácido Caamaño, Antonio Flores Jijón y Luis Cordero.

Conflictos Políticos. Revolución Liberal

Las Montoneras, Alfaro y la Revolución.- Las montoneras fueron probablemente el más importante fenómeno de movilización social del siglo XIX republicano. Toda la tropa montonera o al menos gran parte de ella andaba a caballo. Así surge el joven revolucionario Eloy Alfaro que en 1882 lanza su campaña desde Manabí a Esmeraldas en contra del dictador Veintimilla, fracasa pero al final de este año sus seguidores logran derrocar al gobierno. En las elecciones, sin embargo, una coalición de los partidos conservadores con algunos liberales lograrían dar un respiro a la oligarquía, que duraría 11 años en el período Progresista. Se suceden los gobiernos de José María Plácido Caamaño, Antonio Flores Jijón y Luis Cordero. La Venta de la Bandera El año de 1894 marcó un nuevo repunte político para las fuerzas insurgentes del liberalismo, gracias al estallido del escándalo de "La venta de la bandera", turbio episodio internacional protagonizado por el gobierno de Luis Cordero y particularmente por su gobernador en la provincia del Guayas, el ex ­ presidente Caamaño. La opinión pública ecuatoriana se inflamó de coraje por lo que consideraba una humillación al honor nacional, que venía a sumarse a los múltiples negociados anteriores del gobierno de "La Argolla". El Estallido Revolucionario.- Respondiendo al llamado del líder radical, el 12 de febrero se producía en Milagro el levantamiento armado de Pedro Montero y Enrique Valdez Concha, cuya montonera atacó el ferrocarril de la costa y se dirigió en él hacia el interior de la costa. El 17, Vinces proclamaba la Jefatura Suprema de Alfaro, mientras las montoneras se multiplicaban en toda la cuenca del Guayas y en Manabí. El 20, los conservadores insurreccionaban a la guarnición de Ibarra y proclamaban la Jefatura Suprema de Camilo Ponce, iniciando con ello la lucha en la sierra norte. La facción Pancista cambia de actitud luego de la renuncia de Cordero y apoya al vicepresidente Vicente Lucio Salazar. Esto y la gestión unificadora de la derecha impulsada por la Iglesia, lograron crear en la Sierra un frente único conservador ­ católico, para enfrentar el avance del liberalismo radical que triunfará ya en la Costa. Campaña de la Sierra y Guerra Civil Alfaro inició su gobierno bajo el lema de "Perdón y Olvido". San Miguel, en la Provincia de Bolívar (8 de agosto), Ambato (15 de agosto), Gatazo en la Provincia del Chimborazo (15 de agosto) y Girón, en la Provincia del Azuay (23 de agosto). La Configuración del Estado Laico La toma del poder por Eloy Alfaro fue solo el comienzo de un amplio esfuerzo de renovación y modernización de la sociedad ecuatoriana. Empero, la mejor definición del programa revolucionario fue quizá el "Decálogo Liberal" redactado por el coronel Aristizábal y publicado en el periódico "El Pichincha" bajo el seudónimo "Somatén", que planteaba: 1.- Decreto de manos muertos. 2.- Supresión de conventos. 3.- Supresión de monasterios. 4.- Enseñanza laica y obligatoria.. 5.- Libertad de los Indios. 6.- Abolición del Concordato. 7- Secularización eclesiástica. 8.- Expulsión de clero extranjero. 9.- Ejército fuerte y bien remunerado. 10.- Ferrocarriles al Pacífico.
La Separación del Estado y la Iglesia. El Impacto de la Máquina de Vapor en las Comunicaciones del Siglo XIX (en el Ecuador) Segunda Presidencia de Leonidas Plaza Con la masacre de Alfaro y sus tenientes no concluyó la tragedia del liberalismo. Por el contrario, ello abrió las puertas a nuevos episodios de sangre, que se extendieron hasta 1916. El primero fue la terrible disputa de poder que se entabló entre los generales Plaza y Andrade, convertidos en candidatos presidenciales del bando vencedor, que concluyó con el misterioso asesinato de Andrade y el nuevo triunfo electoral de Plaza, que asumió el poder el 1º de septiembre de 1912. El segundo, la "revolución de Concha" en Esmeraldas, que tuvo como objetivo declarado "vengar la muerto de los Alfaro" y duró tres años. A partir del segundo gobierno de Plaza, el régimen liberal, perdida ya su ruta original, terminó por renegar de su ideología revolucionaria y por transformarse en un despiadado régimen plutocrático. Ese régimen era el producto de un nuevo bloque de poder, integrado por la gran burguesía bancaria, que encabezaba el guayaquileño Francisco Urbina Jado; la emergente burguesía agro ­ industrial, representada por el coronel Enrique Valdez Concha, propietario del ingenio Valdez, y el nuevo poder militar, que lideraba el general Leonidas Plaza Gutiérrez, que a la vez era representante del sector terrateniente de la sierra.
La nueva oligarquía en el poder hizo de la guerra de Esmeraldas un fabuloso negocio financiero. El gobierno de Plaza, carente de recursos para sostener esa larga campaña, recurrió a préstamos de la banca privada, que los proveyó mediante grandes emisiones de papel moneda sin respaldo, obviamente toleradas por las autoridades. Esas emisiones, iniciadas años atrás y largamente superiores al monto de los préstamos hechos al gobierno, se convirtieron en un sistema de estafa al país por parte de la banca y causaron una tremenda inflación. Así, el sucre, que en 1898 equivalía a un dólar, en 1911 se cotizaba a dos por un dólar y en 1914 a 2,12 por dólar. Más, como legalmente existía libre convertibilidad y los tenedores de papel moneda empezaron a exigir que éste fuera cambiado por moneda de oro o plata, el gobierno salvó a la banca mediante la emisión de una "Ley Moratoria" (30 de agosto de 1914) que suprimió la libre convertibilidad. De este modo se encubrió y legalizó oficialmente la estafa hecha al país por la burguesía bancaria y se garantizó la continuación del fraude.
La promulgación de la "Ley Moratoria" fue un hito importante de nuestra historia, pues marcó la hegemonía política alcanzada por la nueva oligarquía financiera, ala que el país bautizó acertadamente como "bancocracia" .

Comprimido: Presidentes del Ecuador

1830-1834 Juan José Flores. Destacaron en este período floreano la incorporación de las islas Galápagos al Ecuador (1832), algunas leyes sobre moneda, acuerdos con la Iglesia Católica y la aceptación de la deuda externa grancolombiana (Deuda Inglesa) contraída por Venezuela, Colombia y Ecuador para financiar la independencia. A Ecuador, que por tanta convulsión no estuvo presente en las negociaciones del reparto de la deuda, le tocó cargar con el 21 y medio por ciento de ella, más de 22 millones de pesos. Los ingresos del gobierno en 1834 apenas llegaban a los 708 mil pesos. 1835-1839 Vicente Rocafuerte Sus reformas económicas respondían al principio liberal de que "el mejor gobierno es el menor gobierno". Por tanto, era antiproteccionista en materia de importaciones, pues creía que la competencia con productos del extranjero mejoraría la producción y redundaría en beneficio del pueblo. Rocafuerte halló en Francisco Eugenio Tamariz un ministro de Hacienda competente. Pese a esta oposición, se dictó la primera Ley de Hacienda que mejoraba las recaudaciones, organizaba la contabilidad e inspeccionaba las cuentas; se inscribió y reguló la deuda interna, y se empezó a amortizarla (200 mil pesos en un solo año). El Congreso reconoció oficialmente la deuda grancolombiana y aceptó pagar la porción de ella señalada por Colombia y Venezuela durante la primera presidencia de Flores. 1845-1849. Vicente Ramón Roca. Roca fue uno de los líderes de la Revolución de Marzo de 1845 contra la omnipotencia del presidente Juan José Flores. Con esta revolución comenzó un período nacionalista que duró hasta la crisis de 1858 a 1860. Manuel de Ascásubi y Matheu 1849-1850 La primera resolución de Ascásubi fue expedir un salvoconducto a Flores, su adversario político. La segunda, nombrar a Benigno Malo ministro del Interior y de Guerra; y a Javier Valdivieso, de Hacienda. Malo estableció escuelas en los cuarteles y escuelas dominicales para el pueblo, mejoró la enseñanza de la medicina y la atención en los hospitales, fundó una escuela de Obstetricia en Cuenca y restableció la de Náutica en Guayaquil. Valdivieso puso orden y claridad en la contabilidad pública. Aduciendo penuria fiscal, Ascásubi cobró por anticipado el tributo a los indios, lo que le valió la oposición del general Urvina. Diego Noboa y Arteta 1850-1851 Exilió a los jesuitas, a los roquistas, enfrentó una guerra con Colombia y fue derrocado por Urvina. José María Urvina 1852-1856 También la Asamblea autorizó que el presidente consolidara los intereses atrasados de la deuda inglesa contraída para financiar las guerras de la Independencia. La deuda subía a 424.000 libras esterlinas; y los intereses, a casi dos millones y medio de libras. La consolidación dejó la deuda en 1'820.000, suma sobre la cual habría que emitir "bonos ecuatorianos de la deuda externa consolidada".. Esta negociación fue oficializada en el Convenio Espinel-Mocatta, apellidos del ministro ecuatoriano y del representante de los tenedores de bonos. Urvina suprimió los impuestos arancelarios a los productos de exportación y eliminó los gravámenes a los bienes de primera necesidad. Creció, pues, la exportación del cacao y de la cascarilla, materia prima de la quinina, único remedio conocido contra el paludismo. Hubo inversión de capitales en estos rubros y tanto la Costa sur como la Sierra sur empezaron a convalecer. Francisco Robles 1856-1859 Robles se había puesto a gobernar con energía pese a que lo acusaban de haber hecho fraude en las elecciones. Sólo tenía que continuar la obra empezada por Urvina. Hubo tranquilidad en 1856 y 1857. Impulsó la educación pública, expidió el Código Civil inspirado en el de Chile y aprobó la abolición del tributo de los indios y el arreglo de la deuda inglesa. El ministro de Hacienda, Francisco de Paula Icaza, y el encargado de Negocios de Inglaterra, Jorge S. Prittchet, habían llegado a un acuerdo sobre los intereses diferidos de la deuda inglesa. Diferidos respecto del Acuerdo Espinel-Mocatta de 1855. Ecuador concedia a los acreedores la explotación y colonización de un millón de cuadras cuadradas a orillas del Zamora y otro millón en las del Bobonaza, ambos en tierras amazónicas de soberanía ecuatoriana. Los colonos extranjeros debían reconocer la soberanía nacional sobre los terrenos explotados y sobre los pueblos que se crearan. Gabriel García Moreno 1861-1865 Gabriel García Moreno lideró durante 17 años la política del Ecuador. Irrumpió en la presidencia de Francisco Robles, concausó la crisis nacional de 1859 - 1860 y la resolvió, impuso un modelo de Estado que descansaba en un orden nacido de la fuerza y que produjo progreso material y retroceso cívico. El influjo garciano encañonó el curso de la historia ecuatoriana en el cauce de una lucha de ideas político-religiosas sin incidencia sustancial en la redistribución de la riqueza de los ecuatorianos. Al tomar posesión de la presidencia, señaló con claridad las líneas maestras de su proyecto político. Proponía un fin último, unos fines intermedios, unos instrumentos de apoyo y unas acciones concretas. El fin último era "lanzar al Ecuador con mano vigorosa en la senda de la prosperidad". 1869-1875 Empezaba el boom del cacao. García Moreno lo utilizó bien. Los impuestos sobre las exportaciones e importaciones constituyeron la fuente principal y más segura de ingresos públicos. García Moreno centralizó buena parte de esas rentas pese a las protestas de Guayaquil. Estableció un nuevo sistema de contabilidad para evitar las defraudaciones al Estado y elaborar de modo más preciso el presupuesto nacional. En el primer año de la segunda presidencia los ingresos fiscales llegaron a 1' 451.711 pesos. En el último año de su gestión los ingresos valían 2' 944.647 pesos.Para articular la economía nacional fomentó la creación de bancos: en 1860 y en Guayaquil, la Caja de Amortización, el Banco de Circulación y Descuento de Luzárraga y el Banco Particular de Descuento y Circulación. El de Luzárraga cerró en 1865 y el de Descuento en 1869. El Banco de Quito y el Banco del Ecuador en Guayaquil empezaron a operar en 1868. Al año siguiente se abrieron las Cajas de Ahorro y Crédito de Cuenca, Guayaquil y Quito. En 1871, el Banco de Crédito Hipotecario de Guayaquil. 1897-1901 Eloy Alfaro apoyado por la burguesía y los montoneros llegó al poder el 5 de junio de 1895. En este período liberal gobernaron hasta 1912: Alfaro, Leonidas Plaza, Lizardo García, Alfaro, Emilio Estrada y Carlos Freire Zaldumbide. La burguesía incluía a importadores, exportadores y banqueros. Buscaba libertad para modernizar la producción agrícola, mejorar el crédito exterior, mover con facilidad el dinero, contratar con ventaja la mano de obra, abrirse al progreso material y a la cultura laica. Los montoneros, los indios, los pequeños campesinos, artesanos e intelectuales radicales querían igualdad, tierra y educación. Querían, sobre todo, muerte a las instituciones que los maniataban a los dueños de la tierra y del dinero. Leonidas Plaza 1912-1916 Entre 1912 y 1925 gobernó el liberalismo burgués. Presidieron el Estado Leonidas Plaza (1912-1916), Alfredo Baquerizo (1916-1920), José Luis Tamayo (1920-1924) y Gonzalo Córdova (1924-1925). En julio de 1925 un golpe militar de tendencia progresista conocido como Revolución Juliana desplazó del poder al liberalismo burgués. Ley de inconvertibilidad de billetes en oro, dominio de los banqueros. Revolución Juliana.

Emancipación de América

Emancipación de América Latina, proceso político y militar que, desde 1808 hasta 1826, afectó a la casi totalidad de los territorios americanos gobernados por España.
El nueve de octubre de 1820.La etapa final de la independencia ecuatoriana se inició en Guayaquil el 9 de Octubre de 1820, cuando los patriotas del puerto destituyeron a las autoridades realistas y se pronunciaron por la libertad.
Las circunstancias eran de las que enfrentó la Revolución Quiteña en 1809. Ahora la independencia tenía un carácter continental y parecía que todos los pueblos debían tomar partido frente a ella. Por el norte, la Nueva Granada había sellado su libertad en la batalla de Boyacá (7 de agosto de 1819), mientras que por el sur Argentina y Chile eran libres, San Martín había desembarcado en Paracas (8 de septiembre de 1820) y preparaba sus operaciones sobre Lima. La marina chilena había roto la supremacía naval española en el Pacífico. Además, las contribuciones que Guayaquil venía haciendo para el sostenimiento de la causa realista se hacía cada vez más pesadas. Por último, un buen número de los puertos con los que Guayaquil podía comerciar eran ahora patriotas, al revés de 1809.
La campaña libertadora de 1820-1822
Al principio pareció que la campaña libertadora iba a ser fácil y rápida. Los pueblos de la Costa se sumaron con entusiasmo a la revolución; Cuenca proclamó su independencia el 3 de Noviembre de 1820; el 11 del mismo mes se dieron parecidos movimientos en Machachi, Latacunga y Riobamba, el 12 en Ambato y el 13 en Alausí. Más todavía, la División Protectora venció a los realistas en Camino Real el 9 de noviembre y ocupó Guaranda. Luego, ya en plena Sierra, llegó hasta Ambato. Luego de algunas victorias realistas, el General Antonio José de Sucre, con su decisión de atacar Quito, vence definitivamente a los españoles el 24 de mayo de 1822; sin embargo habría que librar todavía las costosas guerras (para Quito) de Pasto y de la liberación de Perú, hasta la Batalla de Junín. Así, quedó conformada la Gran Colombia, sueño del libertador Simón Bolívar. En este contexto la economía de Quito, Guayaquil y Cuenca fue arruinada por el esfuerzo enorme de financiar las campañas antes mencionadas. La industria textilera quedó arruinada, junto a la economía serrana. De la misma manera que la economía de toda Sur América; el comercio marítimo cambio de España a Inglaterra, la importación de armas y de manufacturas desde ese país creció en importancia.
La Economía
Durante la Colonia se habían definido tres regiones o espacios económicos diferenciados: la sierra centro norte con su eje Quito; la sierra sur con su eje Cuenca, y la costa con su eje Guayaquil. La sierra centro ­ norte: Era la región donde más definidamente se había consolidado la hacienda como eje de la economía. El mecanismo más común de expansión del latifundio fue el desalojo de las comunidades indígenas, o la compra de sus tierras por presión o fraude. La hacienda era un complejo de tierras destinadas a la agricultura y al pastoreo, dentro de cuyos límites se asentaba la población trabajadora. La relación productiva prevaleciente era el concertaje. El campesino "se concertaba" (comprometía), en teoría voluntariamente, a trabajar en la hacienda a cambio de un salario, que en la practica no llegaba a pagarse, porque el "concertaje" se veía permanentemente obligado a solicitarlo por adelantado. En la sierra existía un artesanado, productor de manufacturas destinadas a los mercados domésticos y los países vecinos. Trabajos en cuero y textiles fueron un rubro significativo, aunque conforme avanzaba el siglo XIX, se fue acentuando una crisis de la producción artesanal. La importación de textiles de Inglaterra arruinó a la mayoría de obrajes.
Bibliografía:
HISTORIA ECONÓMICA DEL ECUADOR; Paredes Ramírez Willington, Editorial Libresa.2000.
Ecuador: Raíces del Presente. La Hora online.

Comercio, sistema bancario y sistema monetario.

Comercio, sistema bancario y sistema monetario.
El proyecto del estado nacional Heredero de una marcada regionalización, existente desde finales de la época colonial y agudizada en la Gran Colombia, el Ecuador nació a la vida independiente profundamente fragmentado, fragmentación que lejos de disminuir durante las tres primeras décadas republicanas se profundizó aún más a consecuencia del desarrollo de las diferencias regionales entre Quito (sierra-centro norte), Guayaquil (costa) y Cuenca (sierra-sur). En tales circunstancias, y tras la crisis de 1859, el régimen garciano se enfrentó al reto de la integración nacional. Aunque ésta no era la primera vez que se hacía un esfuerzo en tal sentido, García Moreno puso en marcha un peculiar proyecto político organizado sobre la base de los principios, visiones y formularios religiosas que, en un país tradicionalmente católico como éste, él considero el recurso más eficaz a través del cual unificar nacionalmente a la población ecuatoriana.
El sector económico Durante esta etapa, la economía ecuatoriana vivió un importante despegue, relacionado con el auge de las exportaciones cacaoteras, consecuencia de la demanda internacional de ese producto, en particular para el mercado europeo y norteamericano que se hallaba en pleno proceso de crecimiento. El aumento de las exportaciones de cacao, que en 1866 "superó la cifra de cinco millones de dólares" (Acosta: 1998:39), trajo consigo algunos efectos significativos, de diversa naturaleza: la incorporación definitiva del Ecuador al mercado internacional, y al mismo tiempo la gestación de un modelo de economía agroexportadora, modelo que, como veremos más tarde, se consolidó en la siguiente etapa (1875-1865); la configuración al interior de la élite costeña "de una nueva clase, la burguesía comercial y bancaria" (Ayala: 1990:81), pequeño grupo de personas vinculadas a las actividades agroexportadoras, y también al inicio de una importante migración campesina de la sierra a la costa, propiciada por los grandes propietarios de las plantaciones cacaoteras, que gracias a ello pudieron obtener mano de obra barata, uno de entre otros factores que permitió estimular la demanda cacaotera.
Reforma fiscal y monetaria El programa del régimen incluyó por otra parte un plan de reformas fiscales y monetarias. Entre oras medidas se tomaron las siguientes: la abolición del tributo indígena, la imposición de un impuesto a los bienes raíces y una reorganización aduanera, que aseguró el cobro adecuado de impuestos por es rubro. Este hecho, sumado al crecimiento de las exportaciones cacaoteras le permitió obtener al Estado un ingreso significativo de fondos sin precedentes anteriores. Este programa de reformas incluyó, por otro lado, una apropiada conducción técnica de las finanzas públicas y en consecuencia una racionalización del manejo de sus fondos. Sin embargo, otra vez algunas de estas medidas no satisfacieron a los interese serranos. Y es que el presidente prefirió optar por las disposiciones librecambistas que beneficiaban al desarrollo del comercio exterior, en donde el Estado obtenía sus mayores recursos, a las medidas proteccionistas que reclamaban los hacendados e industriales, a fin de que reclamaban los hacendados e industrias, a fin de que desde el ámbito estatal se protegiera la producción nacional de productos importados. El modelo garciano, entonces, otra vez apostaba por los intereses costeños que vinculados al gran auge del a explotación cacaotera atravesaba por su mejor momento. Ahora bien, en el aspecto económico el gobierno también experimentó la necesidad de impulsar la creación de sus sistema bancario acorde con la vinculación del país al mercado internacional y al creciente ingreso de capitales. En tal virtud, García Moreno gestionó el establecimiento de Banco del Ecuador (1862), instituto emisor, al que el Estado terminó por vincularse estrechamente en razón de los empréstitos bancarios concedidos. También optó suspender el pago de la deuda inglesa.
La política económica garciana, en virtud de las características que asumió, ha sido calificada de "económica ­ capitalista ­ católica", de fuerte inspiración jesuita. Estatalmente intervencionista, nacionalistas y librecambista, promocionó la vinculación económica interna y externa y se planteó la necesidad de incorporar a los sectores desposeídos de población al mercado laboral. Primeros bancos
El primer banco fundado en el Ecuador fue el Particular de Manuel Antonio de Luzarraga (1859-60), establecido en Guayaquil. Estuvo facultado a emitir “billetes de banco” (el PESO “feble” de 8 reales era la unidad monetaria) con respaldo en metales preciosos (sistema bimetálico). El banco también debía otorgar créditos a los gobiernos. La Primera Ley de Bancos El 3 de noviembre de 1871, el Congreso Nacional de Quito dictó la primera Ley de Bancos (25 artículos), que el presidente Gabriel García Moreno ejecutó el 7 de ese mes (“El Nacional”, 13 noviembre, 1871). La emisión de billetes no podía exceder del triple del capital real “consignado por los accionistas en moneda metálica efectiva” y todo exceso se aplicaría al fisco como multa, además de recogerse los billetes. Todo banco estaba obligado a mantener un fondo de reserva, al cual debían destinarse la mitad de las ganancias líquidas anuales, después de deducido el 12% por la porción entregada por los accionistas. Este fondo debía emplearse íntegramente, cada año, en traer del extranjero moneda de plata legal y, además, estaba destinado a reparar las pérdidas del capital social y a completar el dividendo del 12% anual por las cuotas entregadas por los accionistas. La ley dispuso claramente: “Todos los accionistas que hubieren tomado indebidamente el fondo de reserva serán castigados con una multa igual a la cantidad indebidamente tomada”.

ESTADO, FINANZAS PÚBLICAS Y DEUDA EXTERNA.

ESTADO, FINANZAS PÚBLICAS Y DEUDA EXTERNA.
El Ecuador de 1830 a 1860: El 13 de mayo de 1830, una asamblea de "padres de familia" reunida en Quito resolvió separar al Distrito del Sur de la República de Colombia. En septiembre del mismo año, en Riobamba, fue aprobada la primera Constitución del país. En ese año 1830 fue asesinado el Mariscal Antonio José de Sucre y murió el Libertador Simón Bolívar. Así nació el Ecuador, bautizado con ese nombre en un intento por superar las diferencias regionales, puesto que el tradicional nombre Quito despertaba resistencias en los antiguos departamentos de Guayaquil y Azuay. El General Juan José Flores fue designado primer Presidente del Ecuador. Orquestó una alianza del Ejército con las elites terratenientes y comerciales, que los contemporáneos llamaban el "floreanismo". Así controló el poder, directa o indirectamente, hasta 1845. La etapa se caracterizó por la inestabilidad política permanente, el desbarajuste administrativo y el abuso de los soldados, dueños del país. Ya desde los primeros años, Flores tuvo que enfrentar revueltas. La más fuerte de ellas, la de los "chihuahuas", fue acaudillada desde la Costa por Vicente Rocafuerte. También enfrento una guerra con Nueva Granada por la posesión de Pasto, en la que el país del norte venció. En estos años se incorporó oficialmente al país el Archipiélago de Colón, o Galápagos. Se realizó también en Bogotá una distribución de la deuda externa de la antigua Colombia, en el que al Ecuador le fue asignada una alta cuota, cuya amortización pesaría en toda su historia. En 1835 Flores dejó el poder y, luego de vencer en una guerra civil, apoyó a su adversario Rocafuerte para que ocupara la Presidencia de la República, habiendo sido electo por una Asamblea que expidió la segunda constitución del país. El gran esfuerzo organizador de Rocafuerte, realizado con un significativo despliegue de represión, no pudo superar las realidades de desarticulación de la etapa inicial, pero puso las bases de algunas reformas fiscales, educativas y de formación castrense, pioneras en la historia republicana del Ecuador. Flores ejerció el poder un segundo período desde 1839, pero en esta vez no quiso dejar la presidencia. Do un golpe de estado y en 1843 convocó a una Constituyente, la tercera de la historia, que lo eligió por tercera vez presidente merced a una Constitución redactada ad-hoc, la "Carta de Esclavitud", que establecía las condiciones de una cuasi dictadura perpetua. Hubo agitación y protesta pero el gobierno las controló, hasta que en marzo de 1845, una fuerte reacción acaudillada por la elite guayaquileña, la llamada "Revolución Marxista" dio un golpe de estado. Luego de una guerra civil, Flores aceptó alejarse del poder y del país. Los años subsiguientes los pasó organizando invasiones al Ecuador con mercenarios extranjeros, para recobrar el poder, al servicio de España y Perú. Deuda Externa: para lograr la independencia de España, los pueblos latinoamericanos tuvieron que comprar equipos bélicos en el exterior con recursos contratados en Europa. Estos préstamos provenían de países como Gran Bretaña, interesada en debilitar la presencia española en América, habida cuenta de que no se consiguió el respaldo buscado en los Estados Unidos que se habían independizado en 1776. La deuda contratada en esa época, a través de la cual se vinculó a la economía mundial, se transformó en n proceso pernicioso de renegociaciones y moratorias que aún al finalizar el siglo XX redunda en la hipoteca del país. Ya en 1826, cuando aún existía la Gran Colombia, se dejó de servir la deuda externa como resultado de la quiebra de la casa "B.A. Goldschmidt y Cía.", en la cual se había depositado valores destinados a pagar algunos de sus dividendos. Años después, en octubre de 1834, cuando el Ecuador se había separado de la Gran Colombia, el país no envió su representante a la reunión que se celebró en Bogotá para discutir los términos del reparto de dicha deuda. El gobierno del general Juan José Flores se hallaba complicado con los efectos de la represión y asesinato de los redactores de "El Quiteño Libre" y con la rebelión de los "chihuahuas". Así, de la deuda que ascendía a 6'625.950 de libras esterlinas, al Ecuador le tocó el 21.5% de la deuda total, o sea la suma de 1'424.579 de libras esterlinas y 5 chelines. La negociación fue ratificada en 1837 por el Congreso Nacional y el gobierno de Vicente Rocafuerte. Y desde entonces, los continuos arreglos y renegociaciones y las múltiples suspensiones de pago, dada la permanente carencia de recursos financieros, hicieron de la deuda externa un escollo casi permanente en la vida económica y política del país. En vista de las necesidades financieras del país y las presiones de los acreedores, en 1843, la Convención ordenó que el pago de la deuda se hiciera con los valores recaudados por la venta o el arriendo de las tierras baldías. El general Flores () propuso un arreglo que establecía el pago de una tasa de interés adicional por un número determinado de colonos europeos que viniera a poblar los territorios que se querrían entregar a los acreedores. Los tenedores de bonos no aceptaron estas propuestas e insistieron en tasas de interés más altas y en la emisión de bonos para cubrir los intereses capitalizados, con lo cual se entorpecieron las negociaciones. Este afán de los tenedores de bonos encontró campo propicio en los gobernantes, en sus representantes en las negociaciones y hasta en sus familiares dispuestos al peculado y al tráfico de influencias. En 1848, bajo la presidencia de Vicente Ramón Roca, el gobierno, en la más absoluta reserva, llevó a cabo negociaciones con Pedro Conroy, representante de los acreedores, para que las amortizaciones se hicieran con la octava parte de los derechos de las aduanas. Se intentó sorprender al Congreso, cuya intervención se trató de obviar. Sin embargo, no se logró ese objetivo. En 1852 llegó al país un nuevo representante de los acreedores, Elías Mocatta, quien lograría, luego de más de veinte años de moratoria, un primer arreglo basado en la entrega de terrenos baldíos.

Capitalismo: Contexto Mundial

Capitalismo: Es el sistema económico en el que los individuos privados y las empresas de negocios llevan a cabo la producción y el intercambio de bienes y servicios mediante complejas transacciones en las que intervienen los precios y los mercados. Aunque tiene sus orígenes en la antigüedad, el desarrollo del capitalismo es un fenómeno europeo; fue evolucionando en distintas etapas, hasta considerarse establecido en la segunda mitad del siglo XIX. Desde Europa, y en concreto desde Inglaterra, el sistema capitalista se fue extendiendo a todo el mundo, siendo el sistema socioeconómico casi exclusivo en el ámbito mundial hasta el estallido de la I Guerra Mundial, tras la cual se estableció un nuevo sistema socioeconómico, el comunismo, que se convirtió en el opuesto al capitalista. La libertad de empresa. Libre entrada y salida. La libertad de elección se aplica a las empresas, los trabajadores y los consumidores. Competencia se refiere a la existencia de un gran número de empresas o personas que ofrecen y venden un producto (son oferentes) en un mercado determinado. El capitalismo se basa en una economía en la cual el mercado predomina. El mercado, por medio de las leyes de la oferta y la demanda, regula los precios según los cuales se intercambian los bienes y servicios, permite la asignación de recursos y garantiza la distribución de la renta entre los individuos. Cada uno de los actores del mercado actúa según su propio interés. El gobierno en una economía capitalista pura está reducido a su mínima expresión. Origen El capitalismo surge cuando los derechos de propiedad se establecen de forma definitiva de tal forma que los propietarios puedan disponer de sus recursos, principalmente la tierra, de la mejor forma. Esta transformación se presenta en la parte suroriental de Inglaterra a comienzos del siglo XV cuando los señores feudales pasan de un sistema donde la tierra era explotada por sus siervos sin que ellos fuesen los dueños y con pocos incentivos para incrementar su productividad a un sistema de arriendo, donde la renta dependía de las condiciones del mercado generadas por la competencia entre arrendatarios actuales y potenciales por obtener dichas tierras. Dado que ahora las ganancias eran la base sobre la cual se calculaba el pago de la renta al dueño de la tierra, tanto los arrendadores como los arrendatarios tenían un interés en aplicar nuevas técnica agrícolas que aumentaran al productividad, lo cual en muchos casos genero una expansión en el área cultivada y una reducción en la mano de obra. Debido a la reducción en el empleo rural, muchas personas se vieron obligadas a migrar a las ciudades donde se empleaban en las incipientes fábricas, muchas veces con salarios bajos y jornadas de más de 12 horas. Sin embargo, la mayor producción agrícola generada por la aplicación de nuevas tecnologías permitió que los precios de los alimentos se redujeran y en general el salario real aumentara, es decir, aún aquellos que ganaban un salario bajo podían comprar más bienes. También esta nueva clase obrera demandaba bienes básicos de consumo masivo y menos calidad lo cual genero un auge en la industria y abrió nuevas industrias que satisfacían esta demanda.
Revoluciones Burguesas: Dentro del proceso de consolidación del capitalismo se hizo necesario llevar a cabo procesos de revolución. Revoluciones BURGUESAS que precipitaron la ruptura de relaciones sociales feudales o que no eran convenientes al modo de producción capitalista. Dentro de estos procesos se llevaron a cabo, tardíamente, rebeliones campesinas, de obreros y lumpenes, mismos que fueron derrotados al quedar en medio de la pugna entre moderados y radicales, ambos burgueses, ambos liberales, ambos capitalistas. Como ejemplo tenemos las revoluciones de independencia en Hispanoamérica, las revoluciones de 1848, 1830, 1820 en Europa, etc. El proceso fue mundial puesto que el capitalismo desde el siglo XVI había ido expandiéndose, es decir, el proceso revolucionario es esencialmente burgués (Marx en el Manifiesto comunista) en el que presencialmente actúan de manera importante campesinos, obreros y lumpens pues sin ellos todo movimiento revolucionario fracasaría, puesto que son ellos base importante del proceso productivo social. La Crisis del Antiguo Régimen y el inicio de la Revolución liberal: Con el capitalismo naciente, y el poder económico concentrándose en la clase burguesa, el régimen Medieval Monárquico Absolutista, que basaba su poder en la organización feudal, se vio amenazado; surgen también pensamientos liberales, donde se propone el establecimiento de la República, que es la asunción al poder de la clase burguesa que era la clase productiva. Independencia USA. Revolución Francesa. Los nuevos ideales nacidos de la Ilustración; en el caso inglés, al sumar a su propio devenir histórico (revolución religiosa, revolución Gloriosa) los inicios de la industrialización y los cambios en la mentalidad vemos cómo todo brota en la Nueva Inglaterra americana. Las colonias americanas entran en guerra con la metrópoli a consecuencia de una subida en los impuestos (1765), pero en el fondo lo que subyace no es más que otro ritmo de entender el tránsito hacia la modernidad. B.-Restauración. Liberalismo y Nacionalismo. Varios son los factores que desencadenaron la revolución francesa: La pervivencia del sistema estamental, visto como anacrónico. Los precios del trigo (sus alzas continuadas han provocado hambrunas). Los desmedidos gastos de un estado que ingresa solo 503 millones de libras pero gasta 629. Los grupos privilegiados no pagan impuestos. La tremenda deuda que la participación de Francia en la Guerra de Independencia USA (2.500 millones) La política de un rey que entiende sus poderes como de inspiración divina y se niega a aceptar los nuevos tiempos. Las Revoluciones de 1830 y 1848.

Siglo XVIII

Siglo XVIII: Al hablar del siglo XVIII en la Real Audiencia de quito es necesario hacer referencia a los aspectos que determinaron el desarrollo o la decadencia de sectores económicos, políticos y sociales específicos. A nivel económico se manifestaron dos procesos diferentes: por un lado, el descenso y la decadencia de la producción de textiles en los obrajes serranos y, por otro , el crecimiento económico del litoral como resultado del auge de la producción de cacao.
El primer aspecto señala el fin de la relación económica establecida a nivel regional (los Andes) que giraba en torno a la producción de la plata de las minas de Potosí y el segundo representa el inicio de la inserción del espacio de la Real Audiencia en el mercado internacional. En cuanto a la propiedad de la tierra, se produce un proceso paulatino de concentración de este recurso en manos de unos pocos grupos familiares, que dio como resultado la consolidación del latifundio. Las "Reformas borbónicas" influenciaron también en la crisis económica. Estas reformas intentaron mejorar la economía y su objetivo central fue conseguir más dinero para el Tesoro Público. Las medidas más influyentes fueran la legalización de las posesiones de tierras en la colonias, a través de las "composiciones" (obtención de un título de propiedad a cambio del pago de una suma de dinero); libre circulación de mercancías al interior del espacio colonial, con la supresión de las aduanas internas; libre introducción de efectos europeos en América, sobre todo textiles; organización de un sistema de transporte de mercancías más moderno y eficiente, para lo cual se suprimieron las flotas de navíos(Arias: 1989: 199). La reducción del comercio de textiles y la introducción de efectos europeos al territorio de la Audiencia de Quito, afectaron directamente a los centros de producción de estos artículos conocidos como "obrajes", lo que trajo como resultado el cierre de muchos de ellos. El comercio de textiles hacia el polo minero de Potosí se liquidó, pero continuó articulado a los espacios del norte del Perú y del Virreinato de Santa Fe, lo que evitó la crisis obrajera total. La concentración de la propiedad de la tierra y consolidación del latifundio: Este proceso no fue un aspecto propio del siglo XVIII. Durante el período colonial las propiedades de los españoles, y posteriormente de los criollos y mestizos, se expandieron con la implementación de ciertos mecanismos, algunos de ellos legales pero muchos arbitrarios. Entre los primeros se puede mencionar a la distribución de tierras por parte de las autoridades coloniales; la compra de tierras; las concesiones realizadas por las autoridades étnicas en favor de personas particulares o comunidades religiosas. Entre los segundos se puede mencionar sobre todo al constante despojos de la propiedad indígena, bien por la falta de títulos o por el abandono de las tierras comunitarias por la disminución de la población y el forasterismo, es decir, la huida de los indígenas de sus parcialidades con el fin de evadir las contribuciones. Los indios forasteros no estaban sujetos al sistema de tributo. En el siglo XVIII la Corona implementó un mecanismo de legalización de las tierras mal o bien adquiridas, a través de las "composiciones". Los propietarios tenían que justificar la propiedad por medio de la presentación de los respectivos títulos. Quienes se encontraron en mejores condiciones para hacerlo fueron los criollos y los españoles peninsulares, mediante los documentos otorgados con anterioridad por la Corona. Muy pocos indígenas aprovecharon de este recurso, por no poseer los papeles que garantizaran su propiedad.
La concentración de tierras favoreció fundamentalmente a las órdenes religiosas (en particular a la de los jesuitas) que lograron acumular enormes extensiones de tierra. Según González Suárez, setenta y siete de las mejores y más productivas haciendas estuvieron en sus manos. Reorientación de la actividad económica de la audiencia: La producción de cacao
Mientras el espacio colonial serrano atravesaba un proceso de crisis y de decadencia económica, la costa vivía una etapa de prosperidad gracias al auge de las exportaciones del cacao a partir de 1765. Entre ese año y 1780, las exportaciones se duplicaron respecto del período anterior y entre 1780 y 1810 se volvieron a duplicar (Arias: 1989: 217).
Mientras la Sierra se vio afectada por el libre comercio impulsado por los Borbones, la Costa se benefició de la legalización de su comercio con Nueva España, intercambio que ya existía, pero por la vía del contrabando, en razón del monopolio comercial ejercido por Lima y Caracas.
Los Astilleros de Guayaquil La importancia de los astilleros de Guayaquil es generalmente reconocida, y aunque desde luego no eran "superiormente ventajosa a todos los demás de ambas Américas y a los más célebres de la Europa", como enfáticamente aseguraba don Dionisio de Alsedo, sí puede afirmarse sin temor a exageración que durante los dos últimos siglos coloniales fueron los principales del Pacífico americano: en palabras de Juan y Ulloa, aunque "hay varios parajes en las costas del Mar del Sur en donde se han fabricado embarcaciones grandes de gavias (), el de Guayaquil es entre todos el que por muchos títulos debe gozar la primacía

Obreros, obrajuelos y chorrillos: unidades de producción textil.

Los textiles se elaboraban con los llamados obrajes, chorillos y obrajuelos. Se establecieron obedeció a tres razones fundamentales: Los obrajes se concentraron principalmente en Quito, Latacunga y Riobamba. En estas zonas funcionaron alrededor de cincuenta obrajes, que se fueron estableciendo desde 1560. En lo que se refiere a los obrajes, hubo de dos clases: los de comunidad y los de particulares. Los obrajes de comunidad fueron unidades productivas pertenecientes a las comunidades indígenas, que se fundaron con el objeto de proporcionarles un medio competente a través del cual obtener dinero para pagar el tributo monetario a los encomenderos. Los obrajes de particulares, en cambio, fueron unidades productivas de corte empresarial privado iniciadas por españoles de corte empresarial privado iniciadas por españoles encomenderos o comerciantes, que vieron en el comercio de textiles la oportunidad de obtener magníficas ganancias. Por su parte los "chorrillos" fueron unidades productivas intermedias entre los obrajes de comunidad y los grandes obrajes particulares. Los llamados "obrajuelos" constituyeron unidades productivas de carácter doméstico, que generalmente se instalaron en las afueras de las ciudades, aunque también los hubo en los patios de las casonas familiares. Estas unidades menores trabajaron con mano de obra especializada, es decir, con indígenas que habían aprendido el oficio previamente y conocían cada una de las fases productivas del tejido de los paños. Estos dos tipos de unidades (chorrillos y obrajuelos) se especializaron en la producción de tejidos de baja calidad para suplir las necesidad del mercado local, tales como telas bastas, jergas y bayetas.
TOMADO DEL DIARIO LA HORA ONLINE

Siglo XVI: (El Polo Minero) (1500-1600 d.C)

Siglo XVI: (El Polo Minero) (1500-1600 d.C) El siglo XVI fue escenario de dos importantes fenómenos históricos: la conquista española y el complejo proceso de instalación del sistema colonial. Ninguno de los dos se dio de manera abrupta e inmediata. La motivación primaria de los primeros conquistadores, fueron los metales preciosos. En la conquista del Tahuantinsuyo, se da en una primera etapa “la recolección” de oro y plata, aprovechándose de la tradición minera de estos pueblos. Así, mediante el pillaje, el robo y el rescate, se envía los primeros cargamentos de oro y plata a la Metrópoli Ibérica. En una segunda etapa, este así llamado polo minero fue una actividad generalizada de toda Hispanoamérica, donde los pueblos quiteños no pudieron ser la excepción. Paralelamente con esto se cumplía una función agrícola-textil vinculada a la producción minera en auge, del Alto Perú. En el territorio ecuatoriano las minas de Zaruma y Portovelo, fueron las de mayor productividad.
El motor básico de la explotación agrícola y minera fueron las Capitulaciones, licencias que la Corona otorgaba para explorar y colonizar una determinada zona. Consistían en un acuerdo bilateral por el cual el conquistador asumía los costos de la empresa y la Corona se obligaba a reconocerle franquicias y mercedes. Este sistema facilitó la explotación depredadora y dio gran poder a estos “señores” quienes impusieron linderos y límites, destruyendo la propiedad comunal existente en el Incario.
La encomienda era un derecho otorgado por el monarca en favor de un súbdito español (encomendero) con el objeto de que éste percibiera los tributos o los trabajos que los súbditos indios debían pagar a la monarquía, y, a cambio, el encomendero debía cuidar del bienestar de los indígenas en lo espiritual y en lo terrenal, asegurando su mantenimiento y su protección, así como su adoctrinamiento cristiano. Pero fue utilizada como la forma más efectiva de explotación de la mano de obra indígena. El indio pasó del trabajo comunal al servilismo.
Siglo XVII: (Fase Agrícola Textil) El siglo XVII, en la Audiencia de Quito es el escenario en el cual el Estado español se consolida y aparece legitimado. Desde el punto de vista económico, la Audiencia experimentó una gran prosperidad económica, que influyó en la estructura social colonial. La acumulación de capital permitió la emergencia de nuevos sectores sociales vinculados al comercio, sectores que se convirtieron, en última instancia, en miembros fundamentales de la élite colonial.
Esta fase comienza este siglo todavía muy dependiente del desarrollo minero, en este caso del Virreinato de Perú, que con su eje en la explotación minera del Potosí determinó la formación de un importante mercado a su interior. A través de éste, se comerciaban una serie de productos básicos que autoabastecieron al Virreinato. Así, pues, en este espacio productivamente autosuficiente la importación de productos europeos fue poco importante. Los productos que recorrieron el espacio peruano fueron básicamente textiles de la Audiencia de Quito. De acuerdo con lo señalado, el siglo XVII es el siglo de auge de los textiles. Y es que después de su primer boom, ocurrido entre 1580 y 1610, el segundo se produjo en los años posteriores a 1620. El desarrollo de la manufactura textil en la Sierra hizo que la Audiencia se integre al circuito comercial peruano, pero también el granadino (territorios de la Nueva Granada). Estos vínculos comerciales le permitieron a la Audiencia de Quito introducir en su territorio plata amonedada (plata acuñada), indispensable para las transacciones comerciales internas de menor escala.

Mercantilismo

Historia Económica del Ecuador
Mercantilismo, Siglos XVI, XVII, XVIII.
Mercantilismo: tendencia de la economía política burguesa y de la política económica de los estados en la época de la acumulación originaria del capital (siglos XV-XVIII); reflejaba los intereses del capital comercial cuando éste todavía se hallaba unido al capital industrial. Los mercantilistas consideraban que la ganancia se crea en la esfera de la circulación y que la riqueza de las naciones se cifra en el dinero. De ahí que la política mercantilista tendiera a atraer al país la mayor cantidad posible de oro y plata. Lo que ellos se proponían era acumular dinero en el país por todos los medios, exportando mercancías al mercado exterior. Pero con el creciente comercio internacional se vio la inconsistencia de esta política. Frente a la política de la balanza monetaria activa, se presentó la política de la balanza comercial. Según ellos, el Estado ha de poseer un tamo activo en la balanza comercial, la importación de mercancías no debe superar a la exportación. Para que así fueses se estimulaba el desarrollo de la industria que producía para exportar. El mercantilismo consideraba que la fuente de la riqueza radica en el comercio exterior, y como quiera que fuesen los artesanos quienes suministraban las mercancías que se exportaban, se negaba a la conclusión de que era indispensable fomentar la producción artesanal.[1]
-Los planteamientos mercantilistas sobre política económica se fueron desarrollando con la aparición de las modernas naciones Estado; se había intentado suprimir las barreras internas al comercio establecidas en la edad media, que permitían cobrar tributo a los bienes con la imposición de aranceles o tarifas en cada ciudad o cada río que atravesaban. Se fomentó el crecimiento de las industrias porque permitían a los gobiernos obtener ingresos mediante el cobro de impuestos que a su vez les permitían costear los gastos militares. Así mismo la explotación de las colonias era un método considerado legítimo para obtener metales preciosos y materias primas para sus industrias.
-En el caso de España, el mercantilismo influenció en la innovación de tecnología de navegación marítima, con la invención de las carabelas y de otros instrumentos de posicionamiento. También fue un incentivo para la búsqueda de nuevas rutas comerciales, “la ruta de las especias”, y esto potenció la exploración de ultramar. Finalmente, el descubrimiento de América y el oro y la plata que estaba en ella fue un elemento básico para potenciar el mercantilismo europeo, la revolución de los precios y el capitalismo primario. España, tenía un mercantilismo más bien atrasado al resto de Europa, y sus objetivos eran más bien específicos y se pueden resumir en: “adquisición y acumulación de metales preciosos, tierras y mano de obra para satisfacer las necesidades de la monarquía absoluta y grupos dominantes”[2]
[1] Diccionario de Economía Política online, de Borísov, Zhamin y Makárova.

[2] HISTORIA ECONÓMICA DEL ECUADOR; Paredes Ramírez Willington, Editorial Libresa.2000.

RESUMEN DE LAS CULTURAS PRECOLOMBINAS

Características Generales: Las culturas precolombinas no conocían la rueda, por tanto no tenían ni arados ni carros. Tampoco conocían la domesticación de los animales. Pero tenían conocimientos muy adelantados sobre las plantas. Muchos de los alimentos hoy generalizados en todo el mundo, son de origen americano: el maíz, la patata, el tomate, el pimiento, el cacao, etc. Las culturas precolombinas tenían, sin embargo, un gran desconocimiento de la metalurgia. Contaban según el sistema vigesimal, que correspondía a los diez dedos de las manos y los diez dedos de los pies. La cultura madre de Mesoamérica es la OLMECA. Los olmecas ya disponían de un sistema de escritura en forma de jeroglíficos. Representaban los números en forma de puntos y rayas, cosa que los MAYAS llevarían más tarde a la perfección.La cultura olmeca se va expandiendo hacia el sur, donde nace la cultura MAYA, al Oeste, donde surge la cultura ZAPOTECA, y hacia el Valle de México, en el centro, donde se desarrolla la gran cultura de TEOTIHUACÁN. De la cultura teotihuacana saldría más tarde la cultura TOLTECA, de la que tomarán luego muchos elementos los AZTECAS. La cultura madre del área andina es la de CHAVÍN DE HUÁNTAR, una cultura contemporánea de la olmeca en México. La cultura de Chavín irradia hacia la costa en la que se forman las culturas clásicas. Al final, los INCAS someten a todas las culturas andinas y fundan el gran imperio inca.
Incas: Esta cultura es llamada así por el nombre dado a sus gobernantes (Inca). Según una leyenda se originó en el lago Titicaca, con Manco Capac y Mama Ocllo; luego emigraron a Cuzco lo que sería el centro de este futuro Imperio. Su expansión comenzó con Pachacutec Inca Yupanqui, quien luego de repeler una invasión de los “chancas” con ayuda divina de Viracocha (el hijo del Dios Sol o Inti); comenzaría su expansión en la región andina y posteriormente en algunas zonas costeras y de la amazonía. Este Imperio continúo creciendo con los reinados de Tupac Yupanqui y Huayna Capac, con lo que se consolidó el Tahuantinsuyo (los cuatro rincones del Mundo), que se extendía desde el sur de Colombia hasta Chile. Esta cultura asimiló a la mayoría de las culturas andinas como la Nazca o en el territorio Ecuatoriano a los Quitus-Caranqui. Finalmente los hijos de Huayna Capac, Huascar y Atahualpa, fueros protagonistas de una guerra civil entre Cuzco y Quito, por el control del imperio de su padre; que culminó con la victoria de Atahualpa quien luego sería engañado y secuestrado por Francisco Pizarro, en lo que sería el principio del fin del Imperio Inca.
Azteca: El origen del pueblo azteca es un misterio para la investigación, pues se oculta en narraciones míticas y semilegendarias de dificil comprobación. La tradición remite a Aztlan, al noroeste de México, del que debieron salir otros grupos seminómadas que ocuparon también la cuenca de México. De este "Lugar de Cañas" los mexica, uno de los grupos principales del tronco azteca, salieron tutelados por su dios Huitzilopochtli. En su peregrinar pasaron por varios lugares como Coatepec y Ecatepec, hasta que llegados al valle de México iniciaron una etapa de guerras y competiciones por conseguir un territorio propio; de esta forma, consiguieron permanecer una larga temporada en Chapultepec. Más tarde se emparentaron mediante matrimonios con los señores de Culhuacan, de ahí su nombre de culhua-mexica. Pronto tuvieron que salir de Culhuacan e iniciar un nuevo camino hasta que encontraran un águila subida en un nopal devorando una serpiente según exigía el mito desde su salida de Aztlan, cosa que ocurrió en 1.325 en un pequeño islote del lago Texcoco, que por aquel entonces pertenecía a Azcapotzalco. Con el tiempo lograron emparentarse con la nobleza de esta ciudad hasta la época en que se independizaron e iniciaron la construcción de un gran imperio. Hernán Cortés Hernán Cortés conquistó el Imperio azteca en 1521. Destruyó la ciudad de Tenochtitlán, capital azteca, y sobre ella construyó la ciudad de México.
Mayas: Esta cultura estuvo influenciada por la herencia olmeca; los contactos entre ambas culturas es evidente en la construcción de grandes edificios al comienzo de su historia. Sin embargo, pero fue en el 300-800 d.C que comenzó el esplendor y el progreso de esta civilización. Se construyeron grandes centros ceremoniales como Uaxactún y Tikal (Petén, Guatemala) Estos centros fueron abandonados por razones todavía no comprobadas a mediados del siglo IX, aunque se cree que fueron factores de tipo cultural: riesgos de graves hambrunas, fragmentación política, interrupción de las redes comerciales, guerras e invasiones. Algunos de sus habitantes decidieron emigrar al norte de Yucatán.